En contra de todas las leyes del minimalismo tecnológico, este periférico es inmenso y tiene el cuádruple de teclas que los tradicionales
El inventor de este teclado lo fabricó en un fin de semana.
433% Keyboard es el nombre de un gigantesco teclado creado por un aficionado a la tecnología que, tal como advierte su denominación, tiene más de cuatro veces la cantidad de teclas que un modelo tradicional. En concreto, cuenta con nada más y nada menos que ¡450 teclas! ¿No será demasiado paras las tareas que habitualmente realizamos frente a una computadora?
La filosofía de este periférico va en sentido contrario a una tendencia con creciente visibilidad en el mundillo tecnológico: los diseños minimalistas. En rigor, en el mercado es posible encontrar teclados 60% y hasta 40%, que reducen al extremo la cantidad de componentes y son ideales para los que prefieren tipear en superficies súper compactas y que además privilegian la portabilidad. Por ejemplo, para llevar un teclado pequeño al trabajar fuera de casa.
El monumental teclado es cortesía de Ben Rose, que en esta entrada da cuenta de los detalles de su invento, por cierto creado desde cero y que terminó de desarrollar en solamente un fin de semana. Cabe señalar en este punto que el muchacho no reunió múltiples teclados para conseguir uno gigante, sino que empleó las placas e interruptores necesarios, y soldó los componentes por cuenta propia. Luego agregó las teclas que, tal como podemos ver en las imágenes, tienen distintos colores y procedencias.
Rose confiesa que la parte más difícil fue aquella: elegir qué teclas incluir en semejante superficie.
Según cuenta el inventor, 433% Keyboard tiene 24 teclas de función (el doble que un periférico tradicional), una docena de teclas macro y muchas teclas programables. Hay varias que no tienen indicaciones (y no podemos precisas para qué sirven) y no faltan las clásicas Control, Alt, Esc e incluso la tecla de Windows. En resumen, encontramos 15 filas por 30 columnas de teclas.
Tal como dicen en Xataka, el resultado se asemeja más a un panel de control de una nave espacial que a un teclado para tipear frente a una pantalla de computadora.
“Lamentablemente, no puedo oficialmente llamar a este proyecto terminado hasta que agregue los pies impresos en 3D”, dice Rose, dando cuenta de un dispositivo que podemos calificar como un prototipo. En vista de ello, esperamos más noticias con este alocado periférico como protagonista. “Honestamente no fue tan difícil como creía”, presume el inventor en su publicación en referencia al desarrollo. Eso sí: quizá lo más complicado sea aprender a tipear con tantas teclas bajo los dedos.