Personal del SAME había asistido a Maribel Salazar en la estación del subte, donde fue baleada por un hombre. La oficial murió en el hospital.
Una oficial de la Policía de la Ciudad murió hoy de dos balazos, uno en el pecho y otro en el cuello, cuando tras un altercado con personal del subterráneo un hombre le quitó su arma reglamentaria y efectuó al menos cuatro disparos en la estación Retiro del subte C.
Maribel Nélida Salazar, de 36 años y perteneciente a la División Subtes Línea C, D, E, H y Premetro de la Policía de la Ciudad, fue asistida primero por médicos del SAME y luego fue trasladada en helicóptero al Hospital Churruca.
Un video muestra el esfuerzo de los médicos reanimando a Salazar, quien había sufrido un paro cardíaco tras el ataque. IMÁGENES SENSIBLES.
En un primer parte médico, fuentes de la Policía de la Ciudad informaron que allí fue asistida en el «shock room» e ingresada a quirófano por una herida de arma de fuego en la región de tórax y cuello, que se encontraba con compromiso de pulmón izquierdo y que su cuadro era «crítico y de pronóstico reservado».
Pasadas las 12.30, las mismas fuentes de la fuerza porteña confirmaron que Salazar había muerto debido a la gravedad de los disparos.
Antes de conocerse el fallecimiento de la víctima, el titular del SAME porteño, Alberto Crescenti confirmó que se encontraron con la oficial herida de «dos impactos de bala» pero tras una serie de «maniobras de reanimación» pudieron «compensarla» y sacarla del paro cardíaco, tras lo cual la subieron al helicóptero que la llevó hasta el Hospital Churruca.
«Tenemos también un herido civil, personal de Metrovías. Me están avisando que recibió como una especie de raspón superficial, no corre peligro y lo estamos trasladando al Hospital Fernández», agregó el médico.
El agresor escapó corriendo de la estación, pero fue perseguido por un efectivo de la Policía de la Ciudad y otro de la Policía Federal – con jurisdicción en Retiro-, que lograron reducirlo y arrestarlo frente al hotel Sheraton.
El acusado es un hombre de 30 años con antecedentes por resistencia a la autoridad en 2020 y por violencia de género en 2021, señalaron los voceros.
La oficial Salazar se había unido a la Policía de la Ciudad proveniente de la Policía Federal cuando se realizó el traspaso de los efectivos que trabajaban en las comisarías. Era madre de dos hijos, una adolescente de 13 años y un niño de 5 años.